martes, 22 de diciembre de 2009

El artista


Argentina 2009.

Dir. Gastón Duprat y Mariano Cohn.

Con, Sergio Pangaro y Alberto Laiseca.

Jorge es un solitario, un hombre entre millones. También es enfermero en un siquiátrico, donde cuida con cierta predilección a Romano quien solo reclama de Jorge que le de puchos.

Pero resulta que Jorge está cansado de ser Jorge y quiere pasar a ser alguien, quiere ser el artista que le da título a esta película con guion escrito por un curador de arte.

Sin tener la menor idea de los entretelones del mundo artístico y mucho menos del negocio del arte Jorge se presenta a una galería con intenciones de mostrar algunos dibujos que trae con él, pero las puertas de ese mundo no están abiertas para todos o al menos eso parece. Tras sortear los primeros escollos este Don Nadie accede a la galería y sus supuestos trabajos son presentados a la gente de arte y además gustan, ahora Jorge pasará a ser Jorge Ramírez El Artista.

La fama alcanza al artista, todo cambia, personas extrañas aparecen, aduladores, snob, alcahuetes y contras. Lo nuevo tiene un lindo gusto y por fin Jorge, el triste y gris enfermero ahora es alguien que tiene una Mac y un televisor plasma, ahora si está incluido en este hermoso mundo del glamour, aunque todo este sostenido de un delgado hilo, apenas sostenido por el arte que genera Romano, el loco que Jorge cuida y el verdadero artista.

Romano pinta por impulso, es su manera de comunicarse con el mundo exterior desde su silla y su silencio sepulcral. Sus manos hablan y se comunican en unas obras que sorprenden a todos pero que nunca son vistas por el espectador.

Para muestra tan solo hace falta un botón. El mundo del arte, el negocio, su gente, los protagonistas y los colados no son más que eso, un pequeño entorno que refleja el resto de lo que somos. La búsqueda a cualquier precio de dejar de ser mediocres, para que alguien nos reconozca, aunque sea por lo que hacen otros. Una obra interesante, aunque nadie sepa lo que significa esta definición, por que quien decide que es o no arte es quien lo mira.